Por Miguel Ángel Buonarroti
Soneto con dos estrambotes. Escrito hacia 1509 ó 1510, mientras Miguel Angel pintaba los frescos del techo de la Capilla Sixtina. En el manuscrito aparece el bosquejo de un hombre, de pie, mientras pinta una figurilla en lo alto; y una frase que dice: A Giovanni (Juan), precisamente al de Pistoya.
Algo burlesco y realista, el soneto se ha considerado siempre claro testimonio de los esfuerzos gigantescos que Buonarroti hizo, sobre su andamio, para realizar, en solitario, la magna obra de la Capilla. El autorretrato es expresivo, y no falto de expresiones coloquiales oscuras, tal el verso segundo: come fa l’acqua a’gatti in Lombardia. Según Girardi, por gatti -gatos- hay que entender campesinos, a los que el agua en malas condiciones producía bocio.
Giovanni de Pistoia fue un literato, amigo un tiempo muy apasionado de Miguel Ángel, a quien dedicó sonetos casi amorosos. Luego surgieron desavenencias en la amistad. Giovanni llegó a ser canciller de la florentina Academia degli Umidi.
Además de sonetos y rimas, escribió una comedia, Lo Gioia. En la época de su amistad con Miguel Ángel -cuando la pintura de la Sixtina, en que el Buonarroti trató a poquísima gente- Giovanni era joven.
SONETO III
Se me ha hecho ya buche en la fatiga,
como a los gatos hace el agua en Lombardía
o en cualquier otra región en que esto ocurra,
que a fuerza el vientre se junta a la barbilla.
Siento la barba al cielo y en el dorso
la memoria, y tengo el pecho de una arpía,
y el pincel sobre el rostro, goteando,
me lo va convirtiendo en pavimento rico.
Los riñones me han entrado hasta la panza,
y hago del culo en contrapeso grupa,
y en vano sin los ojos pasos muevo.
Por delante se me estira la corteza
y por plegarse atrás ahí se me arruga,
extiéndome como un arco de Siria.
Mas falaz y extraño
el juicio brota que la mente lleva,
pues tira mal la cerbatana rota.
Mi pintura muerta
defiende en adelante, Juan, y el honor mío,
pues no estoy en mi sitio ni pintor me digo.